Gran partido de una de las ovejas negras, que se consagró como uno de los pilares defensivos llegando a parecer al gran BECKENBAUER de la época: seguro en el corte, y en defensa, visión del juego, y ejecución en las subidas al ataque. La otra oveja negra confirmó su gran actuación de portero, con paradas espectaculares, aunque abrimos un paréntesis para nombrarlo como la oveja histérica del equipo. Para el resto, informar que la mayoría son descarriadas y que un simple constipado es excusa para no acudir a la cita de los lunes. SEÑORES¡ SERIEDAD, y a quién no le guste el fútbol que se dedique a otra actividad como las muñequitas, ir de compras, etc.